Muchas veces pensamos que el progreso en la vida debe verse como una línea ascendente ininterrumpida. Cuando no se ve así, nos sentimos frustrados, cansados, desesperanzados, estancados y, mucho peor, en retroceso. Si le damos carácter de verdad a esas conversaciones, ¿adivina cuáles emociones surgirán en nosotros? ¿Cuál será la consecuencia de esas emociones en nuestro accionar, y más importante, en nuestro ser?

Es imperativo recordar que nuestro compromiso no está en cómo se vea el camino, sino en llegar a la meta, y que hay infinitas maneras de hacerlo. Más allá; debemos estar conscientes de que muchas veces no podemos ver o trazar la ruta para llegar a esa Realidad de Alto Impacto que hemos declarado para nuestras vidas, pues está aún fuera de nuestro contexto. A veces, será necesario atravesar espacios desconocidos, nuevos y de incertidumbre para lograr algo extraordinario. En esos momentos, puedes tomar conciencia que una cosa es el fenómeno que está ocurriendo, y otra, la explicación que le estás dando. De esta manera, podrás crear una conversación poderosa acerca del estado de tu progreso.

            Entonces, la próxima vez que sientas que tu progreso no se ve como tú crees que debería verse: que, en vez de avanzar, retrocedes; que das tres pasos adelante y dos para atrás; que te estás topando con pared… considera mirarle desde una perspectiva diferente. Verle como una espiral, un resorte. Ésta, cuando parece que baja, en realidad se está enroscando en sí misma para subir a la próxima vuelta. Es imposible retroceder. Como dice la máxima de Heráclito: no puedes bañarte en un mismo río dos veces. Ni tú, ni el río serán los mismos. El pasado no existe: imposible regresar a algo que ya no está. La naturaleza de la vida es el cambio y el movimiento: así que, flojito y cooperando.

Cuidado. No uses esto para justificar tu mediocridad, falta de compromiso o baja participación. Úsalo para desarrollar tu fitness emocional y generar conversaciones que abran posibilidades en tu vida. A partir de éstas, generarás en ti MOVIMIENTO; y sabes perfectamente que con el movimiento, viene ENERGÍA: ¡Justo lo que necesitas para un SALTO CUÁNTICO!

Para escuchar más sobre este tema, puedes ver mi Facebook Live del 17 de agosto de 2022.